Estimados colegas y miembros de la Sociedad,

Estamos muy orgullosos de celebrar el 16,17 y 18 de octubre nuestro 50 Congreso Argentino de Cardiología. Nuestro lema es “Promoviendo la salud cardiovascular”.

Para entender la magnitud de este evento quiero hacer un breve resumen de nuestra historia, la cual nos permite conocernos mejor.

La cardiología argentina comienza el 11 de agosto de 1901 cuando el Dr. Abel Ayerza describe el cuadro clínico de insuficiencia cardíaca asociada a cianosis que él denominó “cardíacos negros” y conocido luego como síndrome o enfermedad de Ayerza.

En el año 1912 se utiliza el primer electrocardiógrafo a cuerda en la cátedra de Física Médica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires por el Dr. Bernardo Houssay, comenzando una era en la que el avance tecnológico empieza a cobrar mayor importancia en el desarrollo de una cardiología moderna por sobre el diagnóstico anatomopatológico imperante con Laenec desde 1816, cambiando la orientación de la cardiología hacia la del “clínico-fisiólogo”.

En abril de 1934 es publicado el primer número de la Revista Argentina de Cardiología como necesidad de tener un medio de publicación especializado en el cual transmitir los conocimientos cardiológicos. Los Dres. Blas Moia y Eduardo Braun Menéndez fueron sus primeros editores a los cuales se agregan otros maestros de la Cardiología tales como Rafael Bullrich, Mariano Castex, Bernardo Houssay, Tiburcio Padilla y Pedro Cossio.

Asimismo, en ellos se gestó la necesidad de crear la Sociedad Argentina de Cardiología como espacio de promoción y difusión del conocimiento científico, la cual fue fundada el sábado 9 de abril de 1937 a las 9 h en el Instituto de Fisiología de la Facultad de Medicina. El 31 de julio de 1937 se presentó el primer trabajo científico de la Sociedad en el Instituto de Semiología del Hospital Nacional de Clínicas titulado: “Diagnóstico de las lesiones tricúspideas Orgánicas y Adquiridas” realizado por los Dres. Batro, Castex y Quirno. Reuniones y jornadas científicas se fueron multiplicando en CapitalFederal, así como en sedes filiales del interior del país. Todo ello determinó la necesidad de organizar un Congreso Argentino de Cardiología y con ese nombre el primero fue realizado en Mendoza en octubre de 1957 bajo la presidencia del Dr Bernardo Lozada, realizándose cada 2 años. Bajo la presidencia del Dr. Carlos Bertolasi se organiza el VII Congreso Mundial de Cardiología que junto a la Federación Argentina de Cardiología (ya creada previamente) se llevó a caboen Capital Federal el 2 de setiembre de 1974 en el hotel Sheraton al cualasistieron 10.000 cardiólogos de todo el mundo y se presentaron 2400 trabajos científicos, siendo un hito para nuestra especialidad. Es en homenaje a este logro que se contabilizan los 50 años de nuestro Congreso el cual se comienza a llevar a cabo anualmente hasta la actualidad.

Con los dividendos del Congreso Mundial y otros aportes se compró en 1975 la sede actual de la calle Azcuénaga.

Toda organización ha tenido tiempos difíciles en nuestro país. Este año se presenta también un escenario complejo. Pero nuestra comunidad cardiológica posee la mística de trabajo que permitirá superar cualquier obstáculo

Nuestro 50 Congreso Argentino de Cardiología debe responder a los estándares de calidad que los maestros fundadores establecieron y nuestra obligación es continuar renovando esos ideales.

El programa científico será de excelencia y la prevención cardiovascular, la insuficiencia cardíaca, la innovación tecnológica, el avance diagnóstico en las imágenes, el cuidado de los adultos mayores y del medio ambiente serán pilares fundamentales. Tendrá un espacio central la discusión de políticas públicas y honorarios médicos, ya que la única manera de poder cambiar algo de nuestra realidad es comprometernos. SAC Joven tendrá un espacio definido por sus propias prioridades.Técnicos y enfermeros, sostén esencial de nuestro trabajo diario, desarrollarán sus actividades específicas. Tendremos como objetivo convocar a colegas de otras especialidades, tan importantes en una medicina cada día más compleja e interrelacionada.El aporte de los conocimientos de los invitados extranjeros sumados a los de nuestros referentes locales permitirá un enriquecimiento mutuo, apostando a una mayor integración americana y fortalecimiento de las relaciones con laseuropeas. Queremos además que el“Congreso” sea un espacio donde estrechar nuestras relaciones personales, fundamentales en la continuación de cualquier proyecto.

Estoy seguro de que entre todos vamos a lograr nuestros objetivos.

Un fuerte agradecimiento a todos por su trabajo y siempre recuerden: la SAC es su casa.